Vernissage

Luego de dos clases intensivas de pintura con el maestro Mazorca Locka llego la primera exposición de la ComandantA.
Al convite vinieron todos. Estaba Juanita, Amalita, Marce, Jorje, Nequi, Cande, Flor, Pili, Mili, Mica, Su, Georgi, Lita, Amado, Aito y Joe entre otros.
La muestra fue un éxito. Bajo el padrinazgo de Mazorca, Ramona vendió a precios irrisorios 150 de las 151 obras que había realizado en dos clases.
Mientras ricos y famosos enloquecían por sus obras, la ComandantA hacia planes sobre el destino del dinero: un 99% para la ciber revolución, un 1% a la descuidada causa de salvar los cocodrilos cíclopes del Tibet.
Entre brindis y brindis y en histérica actitud los concurrentes no ahorraban halagos  ni cumplidos a la ComandantA malgastando piropos y adulaciones.
Pero el universo de flatos y banalidades caería prontamente cuando Mazorca Locka intentara vestir a Ramona con un overol con la leyenda “No soy Locka”.
Lo que sucedió después, solo los concurrentes al evento lo saben. Dicen que Ramona abandono a Mazorca. Cuentan que éste vaga por las calles con overoles y bastidores entre las redondeces de su  cuerpo cual ensamblaje surrealista y que las noches de luna llena echa maldiciones al mundillo del arte y a una tal Porretas.

A pesar de todo: ¡Hasta el triunfo eternamente!

Noticias de ayer, extra, extra!

Hacía meses que no sabíamos nada de la ComandantA Porretas.
Las más disimiles y temibles noticias llegaban a los cuarteles del E.R.R.P anunciando su alejamiento, una renuncia indeclinable y hasta una traición uniéndose al sistema que ella decía aborrecer.
Mientras tanto, el Ejército Revolucionario Ramona Porretas, esperaban pacientemente las ordenes de su líder "la ComandantA".
Fue una tarde cualquiera cuando un sospechoso paquete llego al E.R.R.P. En seis, siete u  ocho minutos se presagiaron todas las catástrofes que podrían suceder si el paquete era abierto.  Menospreciando las advertencias de sus compañeros, la valiente SubcomndantA Enséñame abrió el sobre que estaba junto al paquete.
Mayúscula sorpresa se llevaron cuando descubrieron que la mismísima Ramona les escribía una carta de puño y letra:
Ramoneros:
Tras los sucesos de público conocimiento en que me vi involucrada con hinchamientos y exabruptos verbales; mi médico personal Dr. Levanta, me ha diagnosticado un trastorno mental transitorio (emoción violenta). ¿La cura? sencillamente me recomendó tomar distancia y hacer alguna actividad placentera. Tras una intensa búsqueda revolucionaria de "actividades placenteras" di con él.  El destino hizo que mi camino de grandes luchas, de ideales incorruptibles, de conciencia profunda, se cruzara con el gran artista plástico Mazorca Locka. Puede que todo esto les resulte algo extraño, pero créanme mis fieles ramoneros que este es el camino para nuestra revolución: ¡La pintura!
Espero disfruten de mi primera obra, hecha bajo la supervisión del maestro titulada: "La moda revolucionaria no incomoda".

Más pronto que tarde, recibirán nuevas noticias. Sin más los saluda atentamente su: ComandantA Ramona Porretas
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